Broadcom ha recibido la aprobación de los reguladores de la UE para su adquisición de VMware, empresa líder en tecnología de virtualización, por 61.000 millones de dólares. Esta operación es la tercera mayor del sector informático, por detrás de Dell/EMC y Microsoft/Activision Blizzard. La Comisión Europea llevó a cabo una investigación antimonopolio y determinó que la posición dominante de Broadcom en el mercado tenía pocas posibilidades de abuso, ya que no es lo suficientemente fuerte como para permitirle hacerse con el control total del mercado. No obstante, se han impuesto ciertos requisitos para garantizar una competencia sana.
En concreto, aunque no es probable que el software de VMware y Broadcom se fusionen, parece más realista expulsar a Marvell, uno de los principales competidores de Broadcom, lo que podría hacerse limitando la compatibilidad de los adaptadores Fibre Channel con VMware. Para excluir esta posibilidad, Broadcom se vio obligada a facilitar a otras empresas el código fuente de los controladores y las herramientas para crear adaptadores Fibre Channel compatibles.
Los chips de Broadcom se utilizan ampliamente en teléfonos inteligentes y dispositivos, y se espera que esta adquisición refuerce significativamente su negocio de software, con especial atención al software empresarial y la computación en nube. La operación aún está pendiente de la revisión de la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. y de la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido.
