China triplicará la producción de chips de IA: Huawei y SMIC refuerzan sus posiciones

En un contexto de endurecimiento de las restricciones por parte de EE. UU. y de reducción del acceso a la potencia informática extranjera, China apuesta por el desarrollo de sus propias soluciones en el ámbito de la inteligencia artificial.

Según fuentes del Financial Times, el país tiene la intención de triplicar la producción de aceleradores de IA de la serie xPU en los próximos años.

El papel de Huawei y SMIC

Un elemento clave de la estrategia será la puesta en marcha de una línea de producción especializada que se dedicará exclusivamente a la fabricación de aceleradores Huawei Ascend. Su lanzamiento está previsto para finales de 2025. Otras dos fábricas deberían entrar en funcionamiento el año que viene. La empresa SMIC participa activamente en el proceso, apoyando los esfuerzos de Huawei y desarrollando al mismo tiempo sus propias capacidades independientes.

Integración vertical

Huawei aspira a controlar por completo el ciclo de producción, desde las materias primas y los productos químicos hasta el diseño y la fabricación de chips. Para ello, la corporación utiliza una red de filiales y empresas asociadas financiadas por ella misma.

Este modelo minimiza la dependencia de proveedores externos y refuerza la posición de China en un sector de importancia estratégica.

Nuevas generaciones de aceleradores

El centro de atención recaerá en los chips Huawei Ascend 910D y Cambricon 690, que utilizan el formato propio UE8M0 FP8, desarrollado por DeepSeek. Este estándar proporciona una mayor capacidad de procesamiento de operaciones con coma flotante y permite aumentar significativamente la eficiencia del entrenamiento de grandes modelos lingüísticos y el funcionamiento de los algoritmos de inferencia.

Consecuencias globales

Los planes de expansión de la producción subrayan el deseo de China de alcanzar la independencia tecnológica. La producción masiva de aceleradores de IA nacionales puede cambiar el equilibrio de poder en el mercado mundial de semiconductores y crear nuevos retos para los líderes de la industria de Estados Unidos, Europa y Taiwán.