La computación cuántica recibe una actualización de vidrio en Europa
14:22, 14.07.2025
Investigadores de Italia, Alemania y Francia están colaborando en un proyecto revolucionario: la creación de una computadora cuántica basada en chips fotónicos de vidrio. Liderado por el Politécnico de Milán (Politecnico di Milano), el proyecto busca resolver los desafíos de la computación cuántica práctica aprovechando las propiedades ópticas únicas del vidrio.
Los chips, desarrollados por la empresa italiana Ephos, utilizan la luz (fotones) para transmitir y procesar información. Admiten hasta 200 modos ópticos reconfigurables, lo que permite controlar dinámicamente las trayectorias de la luz con interferencia mínima. “Necesitamos materiales que transmitan la luz de manera eficiente pero que no la absorban”, explica Giulia Acconcia, una de las líderes del proyecto. Por eso el vidrio, con su baja absorción de luz, es ideal.
De la luz a la lógica
El equipo está desarrollando un sistema que genera fotones individuales y los guía a través de circuitos ópticos en vidrio. Estos chips podrían algún día ayudar a los científicos a diseñar mejores baterías, desarrollar nuevos medicamentos y explorar los misterios del cosmos. La impresión láser sobre vidrio permite crear circuitos ópticos precisos, mientras que las fibras ópticas introducen partículas de luz en el chip con pérdidas mínimas.
La empresa alemana Pixel Photonics está construyendo detectores de fotones ultra sensibles, y Schott AG produce sustratos de vidrio de alta calidad. Mientras tanto, el equipo de Acconcia desarrolla electrónica avanzada para controlar el sistema.
El camino hacia 2026
Para 2026, el objetivo es crear un dispositivo cuántico fotónico funcional en la Universidad La Sapienza de Roma. Equipos franceses del CNRS y de la Universidad de Montpellier están desarrollando software de código abierto y modelos de almacenamiento de energía para apoyar aplicaciones cuánticas.
¿La primera tarea? Mejorar la química de las baterías de iones de litio utilizando algoritmos cuánticos variacionales, capaces de simular interacciones moleculares complejas mucho más allá de lo que pueden lograr las computadoras de silicio actuales.